El Gobierno ha dado un paso significativo en su agenda de desregulación al oficializar la desregulación completa del servicio de correo postal. Esta medida, anunciada por el portavoz presidencial Manuel Adorni y confirmada mediante el decreto 1005/2024 publicado en el Boletín Oficial, busca fomentar la competencia, la digitalización y la seguridad en el sector postal.
La desregulación del servicio de correo postal se enmarca en el proceso más amplio de desregulación de la administración pública y las empresas asociadas al Estado que lleva adelante el Gobierno del presidente Javier Milei, con el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, a la cabeza.
Este proceso ha incluido medidas similares en otros sectores, como la desregulación del servicio de rampas en aeropuertos, que se anunció recientemente. El principal objetivo de la desregulación del servicio de correo postal es aumentar la competencia en el sector.
Según Adorni, «con esta medida lograremos más competencia, mayor digitalización y mejor seguridad en materia postal». La normativa busca eliminar las barreras de entrada al mercado que han restringido la competencia y han derivado en un servicio de peor calidad y mayores precios para los usuarios.
Correo Argentino, la empresa estatal que ha dominado el sector postal en Argentina, se verá directamente afectada por esta medida. La empresa, que cuenta con 1.452 sucursales y 3.675 unidades postales en todo el país, ha enfrentado desafíos significativos en los últimos años, incluyendo una reducción del 80% en el volumen de transporte de cartas y un déficit presupuestario considerable.
En respuesta a estos desafíos, Correo Argentino ha iniciado un proceso de modernización y saneamiento financiero, con el objetivo de equilibrar sus cuentas para fin de año. La desregulación permitirá que nuevas empresas ingresen al mercado postal, lo que se espera que impulse la competencia y mejore la calidad del servicio.
Sustituciones
Además, se prevé un cambio en el modelo de negocio de Correo Argentino, que incluirá la sustitución de muchas de sus oficinas tradicionales por ventanillas de correo instaladas en librerías, almacenes, estaciones de servicio y otros locales. Este cambio busca aumentar el alcance geográfico del servicio postal y reducir los costos operativos.
La desregulación del servicio de correo postal ha generado diversas reacciones. Por un lado, algunos sectores aplauden la medida, argumentando que permitirá una mayor competencia y mejorará la calidad del servicio. Por otro lado, hay preocupaciones sobre el impacto que esta medida tendrá en los trabajadores de Correo Argentino y en la calidad del servicio en áreas rurales y remotas.
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