POLÍTICA
El exgobernador de Tamaulipas reta al gobierno de Morena mientras enfrenta acusaciones de la FGR.
En un acto de firmeza, el exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, ha lanzado un desafío directo al expresidente Andrés Manuel López Obrador y a otros funcionarios de Morena. “Vengan a Estados Unidos, a cualquier corte», ha declarado Cabeza de Vaca. Con esto, reta a sus adversarios políticos a enfrentar la justicia fuera del control del gobierno mexicano.
Este reto surge en medio de las acusaciones que la Fiscalía General de la República (FGR) ha presentado en su contra, incluyendo cargos por delincuencia organizada y lavado de dinero. Sin embargo, Cabeza de Vaca sostiene que estos señalamientos no son más que una persecución política orquestada desde el gobierno de López Obrador con el fin de eliminar a sus adversarios.
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En recientes declaraciones, el exgobernador aseguró que fue López Obrador quien ordenó a la FGR proceder en su contra. Según Cabeza de Vaca, el expresidente utilizó la justicia como un arma para limitar sus derechos políticos y bloquear su participación en futuros procesos electorales.
Esto, según él, se enmarca en una estrategia sistemática del oficialismo para intimidar y silenciar a la oposición.
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La FGR y el uso faccioso de la justicia
El exgobernador ha cuestionado la veracidad de las acciones legales en su contra, asegurando que la ficha roja de Interpol que la FGR alega tener en su contra carece de fundamento. Según Cabeza de Vaca, Interpol ha suspendido la notificación debido a la falta de pruebas contundentes, desmintiendo así la narrativa oficial de la Fiscalía.
Este caso demuestra cómo el gobierno de Morena usa la persecución judicial para eliminar opositores. Al mismo tiempo, desvía la atención de sus múltiples escándalos de corrupción y de su fracaso en materia de seguridad, que han marcado su administración.
Un gobierno que elude la rendición de cuentas
La invitación de Cabeza de Vaca a que los funcionarios de Morena enfrenten la justicia en Estados Unidos es, en esencia, un llamado a la transparencia y a la justicia imparcial. Sin embargo, es poco probable que aquellos que han hecho del poder su escudo y de la impunidad su modus operandi acepten este reto.
Mientras el gobierno se enfoca en perseguir opositores, los problemas reales de México, como la creciente inseguridad y la crisis económica, continúan sin solución. En lugar de gobernar con visión de Estado, Morena sigue apostando por la confrontación política y la manipulación del aparato judicial.
Conclusión
El panorama es claro: mientras el gobierno de Morena desvía la atención con persecuciones políticas, el pueblo mexicano sigue esperando soluciones reales a los problemas que enfrenta día a día. Es momento de que las autoridades dejen de lado las vendettas políticas y se enfoquen en lo verdaderamente importante: el bienestar de la nación.
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