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Juan Pablo De Luca y Lucía Fank destacaron el valor estratégico de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur en su artículo “¿Cuál es el verdadero valor de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur?”. Sostienen que ampliar la promoción industrial es salvaguardar la soberanía.
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uan Pablo De Luca, licenciado en Economía, representante de la Municipalidad de Río Grande ante el FAM, Fondo de la Ampliación de la Matriz Productiva, y coautor junto a Lucía Fank de un interesante artículo publicado en medios nacionales titulado “¿Cuál es el verdadero valor de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur?”, compartió su visión sobre la conveniencia de ampliar la promoción industrial fueguina y de razonar su desarrollo en términos territoriales integrales, para, entre otras ventajas, profundizar la soberanía, contradiciendo aquellas voces y teorías que buscan ponerle fin al beneficio impositivo, razón de ser de nuestra provincia.
De Luca primeramente sostuvo respecto del FAM que se trata de “la primera vez que las empresas que reciben beneficios por el sub régimen de promoción industrial tienen que reinvertir parte de lo que facturan”.
Luego hizo hincapié en el valor estratégico de la región y contradijo las acostumbradas críticas hacia el régimen promocional de Tierra del Fuego: “criticarnos negativamente a los fueguinos es como un deporte nacional que se practica hace mucho tiempo” sostuvo. En cambio, resaltó la importancia de considerar el desarrollo territorial integral: “cuando se mira la promoción hay que mirarla como una promoción no meramente industrial, sino económica y territorial”.
El licenciado en Economía señaló que la visión parcial del territorio es un verdadero problema: “La primera es tener una visión parcial del territorio. Cuando se habla de nuestra provincia, sólo se habla de la Isla Grande de Tierra del Fuego, de la parte argentina, cuando es mucho más”.
En una de las notas, “¿Cuál es el verdadero valor de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur?” los autores sostienen que hay tres grandes sesgos en la visión sobre Tierra de Fuego: “la primera es tener una visión parcial del territorio. Cuando se habla de nuestra provincia, sólo se habla de la Isla Grande, de la parte argentina, cuando es mucho más, son tres grandes regiones, la Isla Grande, todas las islas del Atlántico Sur, y la Antártida Argentina. Cuando se pierde visión de ese conjunto, hay un problema porque, en términos del sub régimen de promoción industrial, hoy en día está en una pequeña partecita, el 3% de todo ese territorio de nuestra provincia bicontinental, y la más grande de la Argentina”.
El experto apreció que existe una segunda visión, esta vez meramente industrialista sobre el sub régimen: “efectivamente, cuando se termina de ver cuántos tornillos o no se ponen, esto que lo dicen de forma irónica, pero en definitiva lo terminan diciendo, es una visión muy acotada. No toma en cuenta, por ejemplo, el resto de los desarrollos que aparecen en el resto de nuestro territorio como la logística antártica, la pesca, el turismo, la ocupación militar y científica que aparece en el Atlántico Sur y también en la Antártida. Muchas veces no con una ganancia actual, sino pensando estos estados de afuera y de otras empresas extranjeras, una ganancia patrimonial futura. Si no tenemos en cuenta eso, es un problema”.
El tercer sesgo definido es el de “una visión externa siempre, sin contemplar las miradas históricas, locales, la construcción de capacidades”. Al respecto, hizo referencia al recientemente fallecido Rodolfo Di Leo y su defensa de la visión integral de Tierra del Fuego: “Fue durante 30 años director de Industria, hizo un enorme trabajo y se la pasó tratando de explicar esto mismo que nosotros retomamos”.
El objetivo final, según De Luca, es fortalecer el futuro de la región: “La idea es acumular todo eso que fuimos aprendiendo, y dar esas discusiones donde se tengan que dar. Porque nosotros ya tenemos una capacidad propia para definir nuestro propio futuro”. En ese sentido, hizo hincapié en la importancia de respetar y promover el desarrollo integral de Tierra del Fuego, en busca de consolidar su soberanía.