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El municipio de La Baule declara todos los años un tópico que define una serie de actividades culturales y escolares. La llegada de Los Pumas determinó que 2023 fuera «el año de la Argentina”, por lo que se pensaron temáticas celestes y blancas en la programación en el cine local, exposiciones artísticas y, a partir de esta semana, una retrospectiva de Juan Manuel Fangio.
La organiza la Asociación Cultural Franco-Argentina y entre los objetos expuestos se destacan fotografías que retratan la participación del Chueco en las 24 Horas de Le Mans con Mercedes Benz en 1955.
Hay imágenes del nacido en Balcarce en el Gran Premio de Mónaco de 1956, donde fue segundo con Ferrari, y hasta improvisando un asado en medio de la ruta. Y otras del Turismo Carretera en Argentina o con el equipo Mercedes en Monza.
Pero también hay otras más íntimas, que lo retrataron en el servicio militar, jugando al fútbol, bailando tango y, de más grande y a colores, en la inauguración de su propio museo en Balcarce. Desde allí viajaron buena parte de las reproducciones que pidió el Automóvil Club de la Región Pays de Loire.
No es de colección, pero el McLaren se llevó todas las miradas. Foto Emmanuel Fernández/ Enviado especialPero el preámbulo de todo fue una caravana de autos entre el aeródromo de La Baule y la explanada del Casino. A 25 euros por barba, los dueños de autos de colección o máquinas de lujo participaron del lanzamiento de la muestra “Fangio: dime cómo conduces y te diré quien eres”.
Un legendario Renault Alpine, descapotables de Citroën de la década del 30, un Lotus, un McLaren amarillo rabioso del nuevo milenio, Porsches con las líneas de al menos cinco décadas distintas.
Un Mini Cooper de la primera hora y varios modelos nunca vistos en la Argentina, como un Morgan Roadster británico naranja, o un Venturi de finales de los 80, de esos que esconden las ópticas en el capot y se asoman cuando se encienden las luces. ¿Motores V8? Sí, pero nada de Torinos: varios de la gama del Jensen Interceptor, también de Inglaterra.
Un Citroën descapotable de fines de la década del 30. Foto Emmanuel Fernández/ Enviado especial La avanzada de la exposición que se inaugurará a mediados de la semana fue la excusa para la experiencia de adentrarse en el sabor de empanadas tucumanas, vinos mendocinos, alfajores y hasta yerba mate. Pero principalmente fue el deleite de adultos que salieron a jugar con sus autitos de colección.