«La cifra es alarmante, pero incluso nosotros no recibimos la totalidad de las denuncias», dijo este viernes por la mañana Ana Rosa Llobet, titular de Missing Children en Argentina, respecto de las desapariciones de menores en el país. Estimó que seis chicos se extravían por día, aunque también aclaró que puede tratarse de una cifra mayor, ya que los casos que se denuncian con demora o que no son denunciados.
Las declaraciones radiales de este viernes que realizó Llobet se dan cuando la desaparición de Loan Danilo Peña casi llega al año y la de Lian Flores Soraide roza los tres meses. Ambos son parte de los 42 casos activos en la Argentina. A ellos se refirió la titular de Missing Children Argentina. «Recibimos, en promedio, seis denuncias diarias por desaparición. Es un promedio: hay días que no hay ninguna denuncia y hay días en que hay ocho. Pero ese promedio de seis desapariciones por día es un número importante», avanzó Llobet.
A su vez, y poniendo como ejemplo los casos de Peña y de Flores Soraide, mencionó la importancia de la «hora de oro» cuando un menor desaparece.
«Se trata de la primera hora luego de que se pierde un niño en la que éste puede ser encontrado dentro de su contexto habitual. Aunque uno no sepa ciertamente dónde está, se intuye que tiene que estar más o menos cerca del entorno en que se mueve. Por ende, la denuncia debe ser inmediata; distinto, por ejemplo, de lo que sucedió en ambos casos mencionados», explicó.
En el caso de la desaparición de Loan Danilo Peña, esa regla de la «hora de oro» no se cumplió, aunque no sólo porque el entorno cercano no haya anoticiado a las autoridades locales rápidamente, sino también porque las autoridades policiales tardaron en tomar declaraciones a implicados y en activar protocolos.
No obstante, días antes, Llobet había advertido sobre esa regla de «la hora de oro»: «No se puede activar la alerta con cada chico que se pierde y eso hace que requiera de una serie de procedimientos y de cuestiones que a veces demoran la activación de la alerta. ¿Por qué no se puede todo el tiempo? Porque si activamos una alarma cuatro o cinco veces por día, la alarma deja de funcionar como alarma».
Luego, en la entrevista de este viernes, Llobet precisó que actualmente Missing Children tiene 42 búsqueda activas en el país y que se trata de casos sobre los que se cuenta poca información precisa. «A veces sucede que las familias no cuentan cuestiones que podrían ayudar a la investigación, que son cuestiones sobre las que no tenemos derecho como ONG a exigir (ni tampoco otro tipo de explicaciones). Por lo tanto, nosotros nos guiamos con información judicial o de servicios sociales», continuó Llobet, en diálogo con radio Mitre.
«Uno puede intuir que algunos casos pueden tratarse de trata de personas, que detrás de esos 42 casos de niños desaparecidos hay algún tipo de delito. Pero eso es terreno de hipótesis, porque esos datos no los tenemos», precisó.
Sin embargo, también fue consultada por otra tipología de delito: el tráfico de órganos. «Nosotros llevamos 18.900 casos gestionados, pero nunca tuvimos un caso de tráficos de órganos, ni tampoco desde el Incucai nos dicen que haya registro de secuestros con fines de venta de órganos: nos dicen que es sumamente difícil sacar un órgano; requiere de una planificación absoluta y que haya un receptor adecuado para ese órgano», culminó.
La actualidad del caso Loan, a casi diez meses de su desaparición
Loan Danilo Peña (5) desapareció el jueves 13 de junio en El Algarrobal, un paraje cerca de Nueve de Julio, en el margen oeste de la provincia de Corrientes.
Hace poco más de una semana, la Cámara Federal de Corrientes ratificó el procesamiento y la prisión preventiva de las siete personas que el año pasado fueron detenidas por la sustracción de Loan Peña.
Con esta medida, Bernardino Antonio Benítez, Laudelina Peña, María Victoria Caillava, el ex marino Carlos Guido Pérez, Mónica del Carmen Millapi, Daniel Oscar “Fierrito” Ramírez y el ex comisario Walter Adrián Maciel quedaron a un paso del juicio oral y público.
Por otra parte, los camaristas Selva Spessot, Ramón Luis González y Mirta Sotelo sólo revocaron parcialmente la imputación que pesaba sobre Caillava; y el ex comisario Walter Maciel.
Respecto de la ex funcionaria municipal Caillava, se le quitó la figura de amenazas, mientras que al ex jefe de la Comisaría de Nueve de Julio, Maciel, se le revocó la figura de encubrimiento agravado por la gravedad del delito precedente y su calidad de funcionario público, para colocarlo como partícipe necesario del hecho.